
Al revés de las veredas, de las elipses de Saturno
al revés de la desesperación, del desasosiego
de cada tratamiento
de las rutinas, y sobrecargas
al revés de la cama y sus suspiros
de sus fornicios y vaya uno a saber...
contraponiendo el "todavía" y el "Aunque"
el "nomas" y el "ya va"
el despertador, y las macetas con malbones
con pensamientos y petunias.
A través de la garganta, de las perezas,
de Neptuno y otra galaxia, de que te busque
y que te encuentre y que te pierda,
y que desee perderte en las estaciones que
creo no ser quien soy habitualmente
de estar callada, como insolada
de estar despierta, como titubeando
al revés de las convicciones, de la anecdótica catarsis
de esculpir sin dudas, las incógnitas arrebatadas
de desconocer, lo que tanto te conozco,
de inevitablemente
manifestar la soberbia
como un miedo repentino
(y viceversa)
De beber el día y masticar la noche
de extirpar las mugres
y al revés, y en contra de todos esos detalles
me enderezo sin preguntas,
sin preguntas te encuentro
en un todavía y un aunque
hasta que nomas, ya va.
No cabe menor duda, que un mayor pupileo
(mi nueva palabra de pupilas)
también te tengo al revés.