martes, 26 de mayo de 2009

5 minutos.

La noche se hacía calle, la ciudad noche, personas se rozaban en cada paso, todos en su burbuja, todos individuales, como ejército de desconocidos.
Entró a un quiosco, quitándose pausadamente uno de sus guantes de lana.

-Virginia Slims, tenés?-
-no, tengo Philip, Marlboro, Le Mans, pero...-balbuceaba rascándose su barba gris, queriendo escapar de ese cuello- No, eso no, lo necesitás por algo en especial? Mirá que todos llevan cosas normales, además...-
- No, gracias, chau-
-Ehhh, Chau?-

Se fué, colocándose sus auriculares primero, luego se puso su guante rojo, mientras caminaba rápido y cada exhalación generaba un vapor grisaceo en el ambiente.
Minutos después entró a otro quiosco.

-Hola, Virginia Slims, tenés?-
-Cómo querida?- Se acercaba al mostrador para poner su oreja frente a la boca de ella.
-Virginia, Virginia Slims, cigarrillos-
-Ah, sí, todos estos inmigrantes con las mismas pretensiones-
-Perdón?- Frunciendo el ceño.
-No m'hijita, hoy ustedes los turistas, me vienen con cada cosa-
-Ah! pero no soy turista, en realidad...-
-Mirá vos, es que no sé, pensé que eras, por, no, es que, por- Mientras buscaba los cigarrillos en la parte de atrás.
Ella miraba la ciudad, el viento frío y seco la atemorizaba.
-Tomá nena-
-Gracias, cuánto es?-
-Eh, 6, qué estás escuchando? Desde acá lo siento-
-Espere que busco en este bolso, uno nunca encuentra nada, yo creo que es el triángulo de las Bermudas- mientras urgueteaba la cartera.- Ah! tome, escucho Ray Charles y llevo también unos beldent menta fuerte-
-Tan chiquita?- Buscando cambio en la caja.
-No catalogue a la música, no tiene edad-
-Sí, yo a tu edad, calculo que debés tener unos veintipico, escuchaba tango, por ahí íbamos a la milonga, claro que eran otras épocas- Buscaba monedas en su pantalón- Nena, no tengo monedas, no querés llevar otra cosa para completar?-
-Ay! todos me hacen el mismo truco!-
- No viste que está jodido para encontrar monedas acá- Mientras seguía buscando- Marta, no tenés monedas?- Exclamaba a lo lejos-
- Bueh... y me gustaba salir por ahí con el tanguito, y era cada salida, nos sentíamos reyes con los pibes de mi época, ay! esos eran tiempos!-
-Sí, me gusta el tango también-
-Decíme nena, sos poeta?-
-Yo? no! Escribo de vez en cuando, pero... no, poeta no, por qué?-
-Tenés carita de...- haciendo gestos con las manos- Las pestañas largas, eso, eso es símbolo de poeta-
-Ah, sí? No sabía! voy a fijarme- Mientras se ponía un guante y recibía el vuelto-
-Sí fijate, así que Ray Charles, bueno nena, cuidate, y si querés algún día pasá de nuevo- Sonriendo mientras su bigote acariciaba sus labios-
-Sí, no suelo pasar por esta zona, hoy es pura casualidad-
Entraba gente al local.
-O el destino-
-Sí talvez el destino- Colocó sus auriculares, guardó su dinero.
-Chau-
-Chau hasta pronto nena.-



No hay comentarios: